Reporta el periódico El Mundo, que aparentemente inocentes, las chanclas se han convertido en una auténtica pesadilla para los habitantes de las playas del norte de Kenia, adonde cada año las corrientes marinas arrastran decenas de miles de estas baratas zapatillas procedentes de toda Asia.
"La Corriente de Somalia provoca que cada año miles de pares de chanclas procedentes de China, la India, Malasia e incluso Madagascar acaben en las playas de Kenia", declara Julie Johnstone, experta en corales y fundadora de la innovadora The Flip Flop Recycling Company, una empresa única en el mundo especialista en la recogida de este tipo de zapatos, que luego transforman en todo tipo de utensilios.
"Los océanos se han convertido en inmensos vertederos de basura de todo el mundo", declara desde su despacho-taller en Nairobi la también conservacionista marina quien lamenta que hoy en día los océanos estén "tan devaluados" y que todas las basuras "acaben en el mar", que sufre "unos niveles de contaminación extremadamente altos".
"¿Sabías que hay un vertedero flotante de un kilómetro de profundidad que se extiende entre Japón y Hawai?", inquiere Johnstone, en alusión a la masa flotante de plásticos y desechos que según denuncian desde hace años algunos científicos estadounidenses equivale a dos veces el tamaño de Estados Unidos.
"La Corriente de Somalia provoca que cada año miles de pares de chanclas procedentes de China, la India, Malasia e incluso Madagascar acaben en las playas de Kenia", declara Julie Johnstone, experta en corales y fundadora de la innovadora The Flip Flop Recycling Company, una empresa única en el mundo especialista en la recogida de este tipo de zapatos, que luego transforman en todo tipo de utensilios.
Sólo en 2008, los 150 colaboradores que la empresa tiene patrullando las playas kenianas recogieron 12.000 kilos de chanclas desechadas, o el equivalente a 36.000 pares. En sus cuatro años de vida, han recogido 70 toneladas.
"Los océanos se han convertido en inmensos vertederos de basura de todo el mundo", declara desde su despacho-taller en Nairobi la también conservacionista marina quien lamenta que hoy en día los océanos estén "tan devaluados" y que todas las basuras "acaben en el mar", que sufre "unos niveles de contaminación extremadamente altos".
"¿Sabías que hay un vertedero flotante de un kilómetro de profundidad que se extiende entre Japón y Hawai?", inquiere Johnstone, en alusión a la masa flotante de plásticos y desechos que según denuncian desde hace años algunos científicos estadounidenses equivale a dos veces el tamaño de Estados Unidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario